En el futuro será posible borrar recuerdos de la memoria

19.07.2012 15:57

 

En el futuro sera posible borrar recuerdos de la memoria En el futuro será posible borrar recuerdos de la memoria
Se trata de uno de los sueños de la ciencia ficción. Llegar a manipular el cerebro para poder eliminar ciertos recuerdos traumáticos o experiencias que no queremos recordar. Y ahora parece que está un poco más cerca de convertirse en realidad.

Un equipo de científicos españoles de la Universidad de Sevilla ha conseguido suprimir temporalmente en ratones la recuperación de recuerdos de la memoria a corto plazo. Los resultados acaban de presentarse en Congreso de Neurociencia Bianual de la FENS, celebrado en Barcelona.

Las aplicaciones clínicas aún están muy lejanas, pero la neurociencia avanza a pasos de gigante en la comprensión del proceso responsable de la formación de recuerdos. De momento el equipo de investigadores ha conseguido interrumpir en ratones la memoria a corto plazo gracias a la aplicación de corriente eléctrica en determinadas áreas combinada con el uso de fármacos. Este bloqueo permitió que los ratones no recordaran cosas a corto plazo y pretende ser el primer avance para empezar a investigar en el ámbito de la memoria a largo plazo, más complicado y de difícil acceso para la medicina.

Los recuerdos se almacenan básicamente en la corteza prefrontal y en el hipocampo. En la corteza se sitúan los recuerdos a corto plazo y en el hipocampo se fijan los recuerdos permanentes. Son estos lo más interesantes desde el punto de vista de la psicología, pues configuran los traumas y las bases de ciertas patologías.

Aunque los investigadores de la universidad de Sevilla también lograron borrar recuerdos del hipocampo de ratones, su éxito fue relativo. El problema es que este tipo de supresión de recuerdos en el hipocampo no es selectiva, es decir, no se pueden borrar los recuerdos que uno desea. De momento.

En cualquier caso, la farmacología avanza a pasos de gigante en la rama de la neurociencia, con el objetivo de conseguir a largo plazo fármacos más precisos, personalizados y efectivos para cada tipo de paciente. Si con el tiempo se desarrollase una tecnología capaz de borrar recuerdos, esperamos desde aquí que, ocurra lo que ocurra, siempre se utilice con fines terapéuticos.